Plasencia ofrece un sin número de secretos dispuestos a ser descubiertos. En esta ocasión vamos a conocer algunos que te presentaremos como opciones formidables para incluir en tu ruta en tu próxima visita a Plasencia.
Además de la peculiaridad de disfrutar de 2 catedrales, un barrio judío y una indudable influencia arquitectónica árabe, la ciudad esconde algunas joyas menos conocidas.
Veremos qué lugares son imprescindibles para incluir en tu visita a Plasencia
El histórico comercio de Plasencia
Desde hace más de 830 años se celebra el mercadillo de la Plaza Mayor. Esta tradición evidencia la influencia que tiene el comercio de Plasencia en su historia.
De hecho, este mercado atrae a muchos habitantes de los valles cercanos, siendo un punto de encuentro y de abastecimiento de vital importancia para las comarcas colindantes.
El primer martes de agosto se hace una gran celebración que recuerda los tiempos medievales con su Martes Mayor. Es quizá el mayor mercado del norte de Cáceres, así que no te lo pierdas si coincide con tu visita.
Plasencia, poco conocida para el turismo masivo
A pesar de todo lo que ofrece, Plasencia aún no es lo suficientemente conocida para el turismo masivo. Esta ciudad tiene mucho de historia y encanto, de turismo respetuoso y en el que no encontraremos grandes aglomeraciones sino rincones de tranquilidad e historia.
¿Qué lugares son dignos de visitar?
El marcador del tiempo de Plasencia
Uno de los lugares emblemáticos para admirar en Plasencia, es el Abuelo Mayorga.
En el Ayuntamiento encontramos la figura de un anciano que está colgado del reloj. Esta figura tiene varios siglos marcando el tiempo de Plasencia. Actualmente se observa una réplica instalada en la década de los años 70. Aunque por supuesto que lo más llamativo es la figura del Abuelo Mayorga, en la estructura hay otros aspectos arquitectónicos que llaman la atención de los turistas.
La catedral vieja y nueva de Plasencia
Pues sí, Plasencia tiene una catedral nueva y otra vieja, lo que te sorprenderá es que la nueva catedral data del siglo XV y la vieja es del siglo XIII. La nueva catedral de Plasencia fue establecida con la intención de sustituir a la antigua, sin embargo, la segunda no fue culminada.
A pesar de estar inconclusa es un símbolo de la arquitectura histórica, no solo de Plasencia, sino de todo el país. Esta obra arquitectónica genera gran admiración entre todos los amantes del arte del siglo XVI. Tiene en su interior joyas extraordinarias de la cultura española.
La restauración de los palacios
Otro de los secretos de Plasencia es que la riqueza cultural y arquitectónica ha incentivado la restauración y transformación de muchas de sus estructuras, específicamente la restauración de los palacios del centro de la ciudad.
Se ha realizado una rehabilitación de las edificaciones del Renacimiento, época que se considera la más importante en la historia de Plasencia.
Estas estructuras, además de poder visitarse en su mayoría, tienen también una utilidad, como por ejemplo el “Hotel Palacio Carvajal Girón”, que siendo un palacio de finales del siglo XVI, recibe hoy a huéspedes de todas partes de España y el mundo.
Plasencia, mucho más que historia
La historia marca la cotidianidad de Plasencia, pero son muchos los lugares de la ciudad tiene para aprender del pasado y mirar hacia el futuro.
Las nuevas industrias agroalimentarias y un entorno natural envidiable, hacen de la visita a esta ciudad una experiencia remarcable que te refleja la Extremadura de hoy en día.
No pierdas la oportunidad de dejarte conquistar por el arte, la historia y sus gentes, en tu visita a Plasencia.